Una conciencia cada vez mayor

E l conocimiento adquirido en los últimos años sobre la osteoporosis y sobre su diagnóstico ha sido inmenso.

Tal vez algunas de las muchas explicaciones que se podrían dar al por qué de esta ventajosa situación es: el enorme incremento de personas que la padecen, el alto costo tanto referido a la salud como al punto de vista económico que representan las fracturas de cadera, el avance en los medicamentos y sobre todo, la posibilidad de trabajar en la prevención de esta enfermedad. Toda mujer tiene el derecho de conocer por boca de su médico de confianza si ella tiene osteoporosis, si tiene riesgo de padecerla y cómo hacer para prevenirla o tratarla.

A la osteoporosis se la ha denominado con justicia “ el ladrón silencioso” ya que sin que nos demos cuenta, nos va robando calcio de nuestros huesos (en mayor porcentaje y velocidad en la mujer) desde muy temprana edad. Tal es así, que el “ pico de masa ósea” a partir del cual toda mujer comienza a perder calcio de sus huesos es alrededor de los 24 años aproximadamente. Por lo tanto, la masa ósea es el principal (si bien no el único) factor determinante de las fracturas. Es por esto que la medición de esa masa ósea es imprescindible si queremos valorar cuánto se ha perdido de la misma.

A medida que han aumentado las posibilidades de diagnostico y tratamiento para la osteoporosis, el interés por esta enfermedad ha ido experimentado un fuerte crecimiento. Los profesionales de la salud han tomado conciencia del problema, muchas veces debido a la presión ejercida por sus pacientes, otras por la información brindada por las sociedades científicas. Lo cierto es que en prácticamente en todos los países se han fundado sociedades osteológicas científicas cuyos objetivos son la promoción e investigación de la osteoporosis. La osteoporosis es un problema de salud pública cuya importancia crece a medida que aumenta la esperanza de vida.

Por último, no debemos pensar que las fracturas por osteoporosis, son un precio que inevitablemente se deba pagar por una mayor longevidad. Todo está al alcance de nuestra mano. Solo debemos intentar cambiar la historia y eso lo lograremos solo y cuando trabajemos en la prevención.